El presupuesto para la atención a la dependencia
sufre un nuevo recorte, un 5,7% sobre lo presupuestado en el ejercicio
anterior, una cantidad que, traducida a cifras reales, supone 81 millones de
euros menos. Pero a esos 1.326 millones en que se queda la atención a la
dependencia, dice el Gobierno, han de sumársele 81 millones para gastos de
funcionamiento y operaciones de capital, con lo que la cifra total sería de
1.407 millones. Pero hay que tener en cuenta que ya el viernes pasado se supo que caía entera la partida de 283 millones que el Gobierno repartía entre las
comunidades autónomas para la gestión de esta ley. Por tanto, el recorte es
inapelable.
El Gobierno señala en su proyecto de
presupuestos que la financiación directa para las ayudas que reciben los
dependientes (el llamado nivel mínimo) ha experimentado un incremento del
18,64% respecto al año anterior, pasando de 1.134 millones a 1.287. Y es
cierto, pero esa cantidad solo puede ir en función del número de dependientes
atendidos, como las pensiones a los pensionistas. Por tanto, habrá que
incrementar incluso esa cantidad, si a lo largo del año se eleva la cifra de
personas con derecho a una ayuda. Pero las cifras totales no dejan lugar a la
duda, caen casi todas las partidas de servicios sociales y la de atención a la
dependencia también. El secretario de Estado de Servicios Sociales, Juan Manuel
Moreno, entiende que con estas cuentas queda garantizada la atención a los
dependientes. Y asegura que la partida suprimida no es algo a lo que obligue la
ley.
Por otro lado, el Plan Concertado, con el que el
Gobierno financia los servicios sociales básicos en los Ayuntamientos ha
sufrido una tremenda caída, pasando de cerca de 86 millones de euros a
alrededor de 50, por usar cifras redondas. No se conocía un recorte así desde
su creación, en los ochenta. Nunca es una buena noticia, pero en tiempos de
crisis, cuando los municipios están desbordados atendiendo a la población que
más lo necesita, cobra tintes dramáticos. Al Plan Concertado ya se le suprimieron
el año pasado 12 millones, que, en el periodo de enmiendas a los presupuestos
la cifra se quedó en una rebaja de unos 9 millones. En total, la partida para
Otros Servicios Sociales, donde queda recogido este Plan Concertado, así como
otros capítulos para la inserción del pueblo gitano, el voluntariado social o
la accesibilidad de los discapacitados se reduce 59 millones de euros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario